Copa Centroamerica 2011: El Salvador 0 Panama 0 (4-5 en penales)

Panamá vence a El Salvador

El juego fue definido por medio de los penal, Arturo Álvarez falló su oportunidad. Marcador final 5 - 4



elsalvador.com
Domingo, 23 de Enero de 2011

Esta tarde, cuando se disputaba el tercer lugar en la Copa Centroamericana, Panamá venció 5-4 a El Salvador desde la mancha de penal. Arturo Álvarez falló su oportunidad.

El encuentro transcurrió sin mayores emociones, ninguna de las escuadras concretó una jugada de peligro.

Al minuto 73, el partido fue suspendido. Un enjambre de abejas se había concentrado sobre la meta salvadoreño de Dagoberto Portillo, se perdieron al menos 13 minutos.

El estadio Rommel Fernández, en Panamá, estuvo vacio.

En el partido previo los canaleros derrotaron a la "Selecta" 2-0.

Ni el tercero



Publicado por elsalvadorfc.com el Dom, 2011/01/23 - 5:00pm

Panamá venció 5-4 a El Salvador en la tanda de penales. Arturo Álvarez falló garrafalmente para los nuestros y los canaleros se llevaron el tercer lugar

Canaleros y cuscatlecos se enfrentaban nuevamente en la Copa Centroamericana. En el último encuentro disputado entre ambas escuadras, los panameños derrotaron a la Selecta 2-0. Hoy se disputaban el tercer lugar del certamen, que se definió en los tiros desde los doce pasos.

A los 17', el panameño Blas Pérez, ingresó al área y sacó un disparo, pero desviado de la portería del arquero, Dagoberto Portillo, que con la vista la sacó del campo. Panamá daba el primer aviso.

Parece que la afición roja le pasó factura a su equipo, pues no asistió en mayor cantidad al Fernández. Los canaleros se querían coronar como los monarcas centroamericanos, pero fueron derrotados por los ticos en la semifinal.

A la altura de los 30´minutos, el partido no tenía brillo. Panamá lo intentaba, pero a pesar de llegar cerca del área cuscatleca, no tenían mayor peligro.

Sin embargo, al minuto 32´, luego de una jugaba preparada en un cobro de tiro libre. Apareció Gabriel Gómez, de cabeza solo en el área de los grandes acontecimientos, pero no logró ubicar bien la número cinco, que se fue desviada a un costado de la portería salvadoreña.

La selección realizó un primer tiempo muy malo. Nunca logró concretar una jugada de peligro. Osael Romero, Jaime Alas y Andrés Flores, nunca se pudieron conjuntar para crear algo para la azul.

Así culminó la primera etapa con un compromiso muy aburrido. Ni Panamá ni nuestra selección daban pinceladas de buen fútbol.

Para la segunda etapa, la tónica fue la misma. Ningún técnico realizó sustituciones, pero los equipos seguían igual o peor que en la primera mitad.

Al minuto 55´, un extraño suceso ocurrió en la cancha. Un panal en la meta de Dagoberto Portillo. El arquero llamó al central para que examinara el travesaño cuscatleco. El equipo técnico del Rommel Fernández resolvió rápidamente la situación.

A los 63´, los nuestros tuvieron una situación de peligro, luego de un centro por la derecha, pero que la defensa panameña se anticipó y no pasó a más. El encuentro seguía 0-0.

El timonel principal de Panamá, Dely Valdez, puso toda la carne al asador. Mandó a jugadores ofensivos para buscar el gol del triunfo sobre la selecta. Los rojos ganaron fuerza arriba, pero no pasaba a más.

Por su parte, “Chelis” Rugamas mandó a sus jugadores ofensivos para lograr más fuerza arriba y poder vencer a la meta canalera. Ahora, los cambios los realizó con más tiempo que en los últimos encuentros.

Al minuto 73´, el partido fue suspendido. Nuevamente, el problema con las abejas volvió a aparecer sobre la meta de “Dago”. El central hondureño debía cuidar a los jugadores y volvieron a ocupar al equipo de logística del estadio Rommel Fernández.

A los 85´, apareció Brown, quien llegó sólo, de cabeza, pero “Dago” estuvo bien en el fondo y ahogó el grito de gol para la Furia Roja.

Debido a la pérdida de tiempo por el inconveniente, el central catracho dio 13 minutos de descuento. Panamá estuvo un poco más cerca de abrir la cuenta, pero la defensa estuvo bien ubicada, lo que hizo que el juego se definiera desde la mancha del tiro de penal. /Samuel Linares

Definición desde los 12 pasos

ESA-Arturo Álvarez-falló (0-0)
PAN-Roberto Brown- anotó (1-0)
ESA-Jaime Alas- anotó (1-1)
PAN-Gabriel Torres- anotó (2-1)
ESA-Léster Blanco- anotó (2-2)
PAN-Erik Davis- anotó (3-2)
ESA-Dagoberto Portillo-anotó (3-3)
PAN-Eybir Bonaga- anotó (4-3)
ESA-Denis Alas- anotó (4-4)
PAN-Amícar Henríquez- anotó (5-4)

El Salvador: Dagoberto Portillo; Xavier García, Luis Anaya, Marvin González, Deris Umanzor; Andrés Flores (Arturo Álvarez 71´), Víctor Turcios, Denis Alas, Osael Romero (Gilberto Baires 58´), Jaime Alas; Rafael Burgos (Léster Blanco 90´). D.T. José Luis Rugamas

Panamá: Jaime Penedo; Harold Cummings, Juan Cedeño, Román Torres, Adolfo Machado (Erik Davis 23´); Marcos Sánchez, Armando Cooper, Gabriel Gómez (Eybir Bonaga 66´), Aramis Haywood; Roberto Brown, Blas Pérez (Luis Rentería 83´). D.T. Julio Dely Valdez.

Tarjetas Amarillas

PAN: Luis Rentería 89´.

ESA: Osael Romero 15´, Marvin González 54´, Léster Blanco 90´, Xavier García 90´.

Benigno Pineda (Honduras)

Estadio Rommel Fernández de Panamá.

Sólo nos dieron el dulce



La selección nunca tuvo la fortuna a favor. En algunos encuentros no mereció perder, pero la efectividad de los rivales nos hizo pagar caro nuestros errores

La esperanza con Arturo Álvarez no fue lo que el pueblo salvadoreño esperaba. Álvarez tiene una gran calidad técnica. Se esperaba que se echara el equipo al hombro y fuera la figura de la selecta, pero falló dos penales muy decisivos.

Dagoberto Portillo: se mandó un buen encuentro, pero no pudo adivinar nungún tiro en la tanda de penales. Muy buen torneo para "Dago".

Xavier García: estuvo bien en la zaga

Marvin González: lideró nuevamente la defensa y logró mantener a cero la meta con la ayuda de Portillo.

Luis Anaya: se mostró solvente por arriba y anuló a un par de delanteros panameños.

Deris Umanzor:tuvo un buen encuentro, pero se dedicó a defensar casi en todo el encuentro.

Jaime Alas: no tuvo un encuentro brillante como los anteriores. Sin embargo, anotó su tiro de penal.

Osael Romero: tuvo un partido malo. No manejó los hilos del partido y le faltó caracter.

Denis Alas: muy bien en la media, paró a varios volantes ofensivo y marcó el gol de penal dejando al arquero sin oportunidad.

Víctor Turcios: ayudó a Alas a detener la ofensiva canalera.

Andrés Flores: no tuvo su mejor encuentro, casi no tocó balón y no logró crear llegadas de peligro.

Rafael Burgos: fue superado por la marca panameña. Le faltó alguien quien lo acompañara al frente de la selecta.

CAMBIOS

Gilberto Baires: entró, pero como si no lo hubiera hecho. No cambió en nada a la selecta en la ofensiva.

Arturo Álvarez: tuvo pocos minutos, pero pecó de inocente en su cobro de tiro de penal. Le faltó caracter y más amor a la casaca azul.

Léster Blanco: entró tarde, pero anotó su disparo desde los 12 pasos. / Samuel Linares

Lo bueno, malo y feo de Panamá vs El Salvador



En la peor presentación de la Copa Centroamericana en el plano futbolístico, la “selecta” cayó en penales (5-4) ante el anfitrión Panamá

Lo bueno

La experiencia – Aunque no se logró la tan ansiada primera final y la posibilidad al título regional, la “sangre nueva” que convocó Rugamas, gozó de un verdadero roce internacional ante la falta de fogueos en vísperas a este torneo. Buen ensayo para los debutantes de cara a la Copa Oro. Aunque habrá que esperar que grupo “selecciona” el nuevo míster, que según los directivos estará elegido para el 9 de febrero.

La figura – A pesar de no tapar ningún penal (aunque adivinó la trayectoria de tres), el también cancerbero de Once Municipal, Dagoberto Portillo tuvo una participación destacada en el partido ante los canaleros. Fue uno de los mejores, que por cierto fueron pocos. El “meta” salvadoreño tuvo cinco intervenciones importantes, que impidieron la apertura en el marcador durante el desarrollo de los “103 minutos”, sumado al desacierto goleador de los anfitriones. Incluso marcó el cuarto penal para los cuscatlecos que no evitó la derrota.

Lo malo

Sin fútbol – Quizás por la falta de motivación tras la eliminación ante Honduras (2-0), el pasado viernes, la “Selecta” firmó su peor actuación en el plano futbolístico. Ofreció una pobre imagen ante un casi vacío Rommel Fernández. Sin idea, demasiado tirado atrás y acusando el cansancio, el combinado nacional cedió la iniciativa del juego hacia los locales. Basta con dar un vistazo a las estadísticas, donde la “Azul” disparó en cinco ocasiones, pero sólo una fue a puerta.

Faltan pulmones – Los cuscatlecos siguen teniendo carencias en la condición física. A los pupilos de Rugamas les faltan piernas en las etapas complementarias, generalmente donde las selecciones contrarias han sacado renta de esa condición. Concretamente, Panamá y Honduras.

Poca chance – Con la eliminación reciente y la disputa del tercer lugar en el certamen regional, José Luis Rugamas podía darle minutos algunos elementos poco habituales en su esquema. Con el propósito de otorgar un descanso a piezas importantes, que acusaron fatiga en varios tramos de los encuentros, y por supuesto para darle minutos a jugadores jóvenes como Herbert Sosa, Gilberto Baires, Milton Molina, Lester Blanco.

Lo feo

En blanco – El volante habilidoso del Real Salt Late, Arturo Álvarez sigue sin romper la red defiendo los colores de la “Azul y Blanco”. Muy por debajo de su nivel, Álvarez erró nuevamente desde los doce pasos tras fallar un penal en el debut de la selección ante Nicaragua. El “zurdo” salió cabizbajo. Incluso derramó un par de lágrimas. Sin embargo, recibió el apoyo de la mayoría de sus compañeros comandado por Marvin González.

Se repitió la historia – El antecedente del pasado sábado 10 de octubre en el estadio Azteca, se volvió a suscitar. Esta vez en el estadio Rommel Fernández, donde la cabaña defendida por “Dago” Portillo fue invadido por abejas, que fueron alejadas de la misma manera, es decir, por medio de un extinguidor. Las acciones fueron paralizadas del minuto 56´ al 61`. Pero nuevamente al 72´, se detuvieron las incidencias para desalojar a las abejas del terreno de juego. Sin embargo, esta acción se complicó, provocando que la mayoría de jugadores se tiraran sobre el engramillado hasta el minuto 78, que se reanudó las incidencias. Lo que generó que le referí otorgará 13 minutos de compensación. /Guillermo Estrada.

Sin consuelo en el canal



Escrito por EL GRÁFICO
Domingo, 23 de Enero de 2011 12:06

PANAMÁ. En un partido sin sabor, sin vida y con poca motivación, El Salvador cayó ante Panamá en la tanda de penaltis y se ubicó en la cuarta casilla de esta Copa Centroamericana que culminó este domingo.

Los pupilos de José Luis Rugamas no encontraron nunca la ruta ni el buen fútbol para llevarse la victoria. Tras el 0-0 del tiempo regular, el pleito se definió en los tiros desde los 12 pasos en el que el fallo de Arturo Álvarez fue determinante para otorgarle la victoria a los de casa que, de alguna manera, se quitan el duro golpe de no estar en la final.

El Salvador no tuvo el brillo de los anteriores encuentros y fue sin duda alguna su peor presentación. Pocas llegadas, poca motivación y el resultado indicaron que este partido, a lo mejor, no se debió jugar. Ahora toca pensar en lo que se viene, en la Copa de Oro y si bien se dejó una buena imagen en términos generales, el tercer lugar hubiese significado al menos un consuelo para este grupo que estuvo cerca de alcanzar un mejor desempeño.

Panamá nos liquidó en los penaltis pero pudo hacerlo anteriormente. Sin embargo, El Salvador demostró que hay buen trabajo a futuro y esta Copa debe ser solamente el arranque de ese proceso.

Rugamas hizo algunas modificaciones tal y como había adelantado. Sentó a Arturo Álvarez y puso en su lugar a Andrés “el Rusito” Flores, que estuvo en la línea de volantes junto a Jaime Alas y Osael Romero. La mentalidad del míster fue la de siempre basar su ofensiva con estos elementos de llegada que buscaron abrir los espacios.

Volvió a darle la oportunidad Dennis Alas para formar una doble contención y tener un esquema de 4-2-3-1, siempre con Rafael Burgos como único elemento en punta. En tanto que en la zona baja, Xavier García volvió al lateral derecho luego de pagar un partido de suspensión ante los catrachos en las semifinales.

Por su parte, el timonel canalero también hizo algunas variantes en su esquema en relación al partido del cierre de fase de grupos ante los cuscatlecos el martes anterior. Felipe Baloy y Blas Pérez, cuestionados por la prensa tras los fallos en los penaltis ante los ticos, recibieron el voto de confianza para regresar al esquema titular.

También lo hizo el portero Jaime Penedo y Roberto Brown. De esta manera, Dely Valdez envió el mensaje que se quería quedar con el premio de consuelo en un estadio vacío tras el batacazo que fue para su afición la eliminación de la gran final.

El Salvador buscó mantenerse a su estilo que le caracterizó en toda la competencia, es decir, que mantuvo el dominio de balón desde el pitazo inicial.

Un enjambre de avispas se ubicó en el marco que defendió Dagoberto Portillo en la segunda mitad (portería norte) y el encuentro se paralizó alrededor de cinco minutos mientras buscaron cómo sacarlas.

Rugamas aprovechó para incorporar a Gilberto Baires en lugar de Osael Romero, que jugó los cinco partidos de la Copa, con el objetivo que se asociara con Alas y le diera mayor profundidad al ataque, así como más acompañamiento a Burgos.

Con el 0-0 final, el partido se tuvo que definir en los penaltis en donde ganaron los canaleros.

Por Panamá anotaron Roberto Brown, Gabriel Torres, Erick Davis, Eybir Bonaga y Manuel Henríquez; mientras que por El Salvador anotaron Jaime Alas, Léster Blanco, Dago Portillo y Dennis Alas; falló Arturo Álvarez.

Rugamas: “No sé si voy a continuar”



Escrito por Williams Sandoval
Domingo, 23 de Enero de 2011 20:12

PANAMÁ. Rugamas dijo estar satisfecho por el esfuerzo de sus pupilos. Al final del encuentro ante los canaleros, el seleccionador José Luis Rugamas dijo sentirse contento por sus muchachos pero no por el resultado. A su juicio, El Salvador tenía la capacidad de disputar la final pero ayer finalizó en la cuarta posición en la copa Centroamericana.

Además, “el Chelís” confesó que tras llegar a nuestro país no sabe qué sucederá con su cargo puesto que “solamente estaba para disputar esta Copa; lo que venga francamente no lo sé”, manifestó. “Vamos a ver qué es lo que pasa porque eso lo debe decidir nuestra dirigencia. Cuando llegue a El Salvador veremos”.

Al ser consultado sobre la copa Oro, próxima competencia para la azul, Rugamas declaró que “no existe un plan de trabajo para preparar esa competencia. Yo vine a este torneo y mañana no sé lo que pasará”, lo que demuestra que tras su participación en la copa Centroamericana, la selección nacional estará a la espera de lo que determine la FESFUT en cuanto a la elección del nuevo seleccionador y la planificación para ese certamen.

Sobre el partido, Rugamas manifestó que “nos caímos físicamente. El clima estaba muy duro y hemos disputado cinco partidos en diez días, lo cual es muy complicado para cualquiera”. Asimismo, argumentó que “este grupo tiene que mejorar, hay talento y el proceso no se debe detener. No sé qué pasará después, pero hay que darle oportunidad a todos estos jóvenes”, agregó.

¡Fumigados! CuartosLa misma historia

El Salvador se despidió de la Copa Centroamericana con un partido gris, en el que perdió por penaltis ante Panamá.



Escrito por Denni Portillo
Lunes, 24 enero 2011
La Prensa Grafica

Hay partidos que se juegan por morbo, por querer hacer historia, por un título. Hay partidos que se juegan porque ni modo, porque hay que jugarlos. El de ayer entre Panamá y El Salvador, para definir al tercer lugar de la Copa Centroamericana, fue uno de estos últimos. Canaleros y cuscatlecos jugaron porque ni modo, porque la base de competencia establecía que tenía que haber un juego para sacar un tercer lugar, que al final terminó en manos del anfitrión del torneo en un choque tan gris que ni siquiera la tanda de penaltis la salvó del bostezo y aburrimiento.

El Salvador cerró así un torneo en el que el consuelo –de tontos, de inteligentes, de analistas y comentaristas– fue que se “logró el objetivo” de clasificar a la Copa de Oro. Claro, lograrlo en un campeonato donde participan siete y clasifican cinco representa un reto mayúsculo para una selección a la que habría que comprender. Hace más de un año que se quedó sin técnico y el chip de lo aprendido acabó por oxidarse, fundirse, destruirse.

Todas las señales de identidad que tardaron cuatro años en construirse hasta que finalizó la eliminatoria al mundial Sudáfrica 2010 ahora no son identificables. No se trata de que antes El Salvador fuera el mejor, pero al menos no era tan peor.

Ayer, en el partido por el tercer juego –el choque donde más allá de un puesto estadístico uno no se juega nada– es difícil decir a qué jugó la Azul. No jugó a ganar, porque José Luis Rugamas tampoco quiso apostar a nada en el partido más intrascendente del torneo: siempre con un solo delantero y dos contenciones. Pero tampoco jugó a no perder, porque cuando Panamá –también una gris Panamá, por cierto– empujó para intentar marcar y vencer, la defensa se aplicó y se libró del peligro rojo. Es decir, al final, se jugó a lo que saliera.

Y lo que salió fueron 90 minutos tan aburridos que uno no sabe si será difícil de olvidar, por lo malo; o fácil de olvidar, porque al final el partido no valía de nada. El Salvador no tuvo una sola llegada de peligro clara en todo el encuentro y lo más a lo que llegó fue a una jugada de azar en la que Rafael Burgos quedó solo ante Jaime Penedo y lo venció por bajo, solo para que el árbitro asistente lo anulara por fuera de juego.

Más por inercia que por mérito propio, Panamá también tuvo sus oportunidades en un remate de Blas Pérez que se abrió demasiado sobre el poste izquierdo de la portería de Dagoberto Portillo, y en un par de jugadas de laboratorio en tiros libres, que cogieron mal paradas a la defensa azul.

Por eso es que no sorprende que lo más destacado del partido hayan sido las dos detenciones del mismo producto de un enjambre de abejas en la portería de Dagoberto Portillo —más de uno habrá recordado el juego de la hexagonal contra México, en el estadio Azteca— y que provocaron una fumigación tal que los jugadores prefirieron protegerse tirándose al suelo.

Esas interrupciones solo hicieron el partido —y el aburrimiento— más largo. Hasta 13 minutos duró el tiempo de descuento que dio el árbitro y en el que Panamá volvió a rozar la victoria con un cabezazo de Luis Rentería que Dago sacó a tiro de esquina en una estirada monumental.

Hubiera sido injusto que hubiera un ganador en los 90 minutos. Injusto porque ninguno lo mereció de verdad. Por eso en los penaltis se decidió quién de los dos era menos malo y, en ese enigma, Panamá salió vencedor. Anotó sus cinco lanzamientos, mientras que la Azul solo convirtió cuatro y ahí estuvo absolutamente toda la diferencia entre ambas selecciones en todo el juego: en un penalti.

Si lo de la eliminatoria a Sudáfrica 2010 era una espina que todavía dolía, después de vencer a El Salvador tres veces consecutivas –el amistoso del año pasado, y dos veces en la Copa Centroamericana– todo apunta a que esa eliminación ya es asunto del pasado.

Total, esa selección salvadoreña también ya es un asunto del pasado. Toca ahora ver hacia el frente y, ya que se consiguió el boleto para la Copa de Oro, comenzar a responder todas las interrogantes que las últimas dos semanas han dejado sobre el combinado salvadoreño.

¿Y ahora qué?

Por fútbol, la Copa Centroamericana dejó en evidencia que cuando los futbolistas salvadoreños lo quieren pueden jugar y dar batalla. Quedó demostrado en el duelo de semifinales contra Honduras, en el que merecieron mejor suerte que caer 2-0 y con un tanto en el minuto final de descuento del partido.

El lío es cuando no quieren. Para evitar que no quieran el problema está en la cabeza. La del jugador y la de quien lo dirige. Y en el torneo regional, el cuerpo técnico de la selección demostró no estar a la altura del cargo. Los triunfos sobre Belice y Nicaragua fueron más producto de la inercia, la misma inercia por la que Panamá venció ayer a El Salvador. Es lo lógico cuando juegan dos equipos de niveles diferentes.

En la Copa de Oro la historia será diferente. Quedan prácticamente cuatro meses para la realización de la misma y el tiempo perdido –en la contratación de un nuevo técnico, en conseguir fogueos, en poner orden en todo lo relacionado a selecciones – luego se lamentará.

Porque en la Copa de Oro ya no hay Nicaraguas ni Belices. Ahí los rivales no son “cenicientas” ni equipos “B” sino que juegan con todos sus foráneos, esos mismos que El Salvador exportó a la MLS y luego regresaron por que no rindieron lo que se esperaba de ellos.

Esa será la oportunidad para que Arturo Álvarez anote su primer gol con la Azul, tras fallar un penalti ante Nicaragua y fallar ayer también el que acabó dando el tercer lugar a Panamá.

Será la oportunidad para que Jaime Alas, Léster Blanco y otro puñado de jóvenes puedan disputar su primer torneo de este tipo.

Será la oportunidad para que los que ya pueden ser considerados “veteranos” dentro de esta Azul demuestren de una vez por todas que lucen con responsabilidad la elástica del combinado.

Faltan cuatro meses para eso. De momento, una nueva Copa Centroamericana ha terminado, un nuevo cuarto puesto se ha ganado (?). Ahora, con el boleto seguro y con una fecha FIFA a la vista –el 9 de febrero, en la que ya está seguro un amistoso contra Haití– toca resolver las preguntas que durante demasiado tiempo ya quedaron guardadas.

Porque cuando llegue junio será momento de jugar partidos que no serán porque ni modo. Esos juegos serán por puntos, por honor, por hacer historia.

La moda es criticar

Los reclamos por un técnico apegado “a nuestra realidad” pasan por populistas llamadas hacia algo más parecido a lo que ha tenido el fútbol salvadoreño: una continuidad para lo que no lo ha llevado a ningún lado.



Escrito por Fernando Palomo

Está de moda defender la mediocridad. Típico de los dinosaurios que suelen alimentarse de las planillas de los paleolíticos dirigentes del fútbol salvadoreño. Siempre en contra de algo que signifique un cambio a su cómoda manera de trabajar. Acostumbrados a maldecir cualquier cosa que los saque de la zona de placer en la que se han apoltronado durante décadas sin proponer absolutamente nada, frenados por su ignorancia, negados a propuestas de cambio. Criticando, simple y llanamente, criticando. Defendiendo la mediocridad en la que históricamente ha navegado el fútbol salvadoreño. De esas modas no pienso vestir.

Se fue Juan Manuel Lillo sin dar respuesta. No hubo nada definitivo, solo la invitación a transformar la casa para generar un cambio profundo. Lo que ha sucedido es elogiable desde cualquier punto salvo, insisto, desde el lugar donde con dinero se genera opinión al gusto del mejor postor.

El CESEN ha hecho un esfuerzo por acercar a la Azul un técnico con trayectoria reconocida y entusiasmado por instalar una idea de juego en la selección. Esa que de cada 10 partidos gana tres, siempre y cuando Belice o Nicaragua se le crucen en el camino. La idea de Lillo no garantiza ganar todos los partidos, pero es una que se acerca mucho más a menudo a ganarlos. Quienes critican la llegada de Lillo son los mismos que teniéndole cerca no se atrevieron a pedirle una charla de fútbol, esos que dicen saber más que ninguno, todo por temor a quedar al desnudo.

El CESEN hizo llegar a Lillo a El Salvador respondiendo a un pedido extremadamente lógico de quien es candidato a casarse con el fútbol nacional. Si alguien pretendió un matrimonio sin conocer a su pareja, lo hizo sabiendo que corre el riesgo de no superar la misma noche de bodas. Lillo vio las instalaciones, conoció a los personajes, vio a la selección. Insumos que procesará para tomar una decisión estudiada. Fácil es criticar el gasto del viaje porque no entienden de inversiones en proyectos serios. Señalaron como debilidad en la búsqueda de un técnico extranjero el desconocimiento del medio, pero al mismo tiempo critican la inversión en que se incurre para que desaparezca la debilidad y conozca el medio. ¿Lo ven? Son los enemigos del cambio, los que siguen defendiendo lo mediocre.

Si Lillo no asume como técnico nacional, algunos pensarán que se ha perdido tiempo y dinero, nada de lo cual sobra en el fútbol salvadoreño, uno que sabemos está enfermo. Lo que Lillo deja es una radiografía y el reto para que se den los primeros pasos para su curación. Se va a modificar la realidad a partir de los sugerencias de Lillo. Lo que pidió Carlos De los Cobos en su momento, ahora también lo pide el español. ¿La diferencia? El CESEN de ahora quiere inyectarle al enfermo un nuevo medicamento. La propuesta es por una mejora inicial en las condiciones de trabajo de los seleccionados nacionales. Cambios en lo fundamental, lo básico: canchas, albergue de concentración. Un paso seguido por cambios más profundos en la estructura dirigencial. Es inconcebible que aún permanezcan en el fútbol personajes que durante años se han instalado sin dar resultado. Siguen ahí, sin hacer y sin dejar hacer.

Los reclamos por un técnico apegado “a nuestra realidad” pasan por populistas llamadas hacia algo mas parecido a lo que ha tenido el fútbol salvadoreño: una continuidad para lo que no lo ha llevado a ningún lado. Los éxitos han sido escasos, minúsculos, casuales y resultado de coincidencias muy alejadas a la planificación. Es necesaria la ambición por grandes cosas, por apuestas que saquen al fútbol de su realidad. Se necesitan propuestas que aporten un cambio de fondo en la manera de hacer fútbol. No entro en la moda de hablar por hablar, cuando es momento de proponer. Para criticar sin generar propuestas están los defensores de la mediocridad. Los ignorantes que frenan los cambios.

“No sé si voya continuar”

José Luis Rugamas, a la espera de definir su futuro en la Azul.



Mucho se habló en Panamá sobre el buen trabajo que en teoría hizo la selección absoluta de El Salvador con una camada de jugadores jóvenes como Alas, Xavier García, Andrés Flores y otros. Se dijo que fue uno de los equipos que mejor trató la pelota, pero al final ese argumento sirvió de poco porque no se pudo marcar diferencia con las potencias de la región. De nuevo, al igual que en Honduras 2009, el combinado cuscatleco tiene que conformarse con el cuarto lugar en una Copa Centroamericana.

Después de la derrota en penaltis ante Panamá, el seleccionador interino José Luis Rugamas aseguró que todavía no hay un plan de trabajo definido de parte suya de cara a la participación de la Azul en la Copa de Oro, que se jugará del 5 al 25 de junio en Estados Unidos.

“Este torneo (la Copa C.A.) nos ha dado mucho para poder analizar y poder crecer y mejorar. Este torneo ha sido significativo. Yo vine para este torneo y no sé qué es lo que va a pasar. No puedo decir que tengo un plan de trabajo y mañana ya no estoy dentro de la selección nacional. Lo que sí puedo decir es que me siento orgulloso de haber formado una base de jugadores jóvenes y se le puede dar un seguimiento”, apuntó el entrenador nacional.

En todo caso, habrá que ver cuál será el balance que hagan las autoridades de la Federación Salvadoreña de Fútbol (FESFUT) después de que Rugamas rinda su informe técnico tras lo actuado en Panamá.

Lo que sí es un hecho es que se viene el amistoso contra Haití el 9 de febrero en el estadio Cuscatlán. Ante esta situación –e incertidumbre–, “el Chelis” no pudo definir si habría nuevos llamados al equipo nacional para el choque ante los caribeños.

Sobre el juego donde se perdió ante Panamá, Rugamas dijo que el calor que imperó sobre el Rommel Fernández a la hora del choque pesó en el rendimiento de sus pupilos, que fueron partícipes del choque más gris que la Azul desarrolló en la Copa Centroamericana 2011.

Al final del encuentro, Arturo Álvarez fue uno de los más tristes por el resultado. El volante del Salt Lake de la MLS echó a perder el primer penalti de la Azul y terminó con lágrimas en los ojos, consolado por el capitán Marvin González.

Del rival

Por otra parte, el técnico de Panamá, Julio Dely Valdés, destacó el buen trabajo que hizo su equipo en el certamen, sobre todo en función defensiva, donde solo recibió un gol en todo el certamen. Ese tanto llegó en semifinales en el choque ante Costa Rica, ante quien luego cayeron en penaltis.

En todo caso, el timonel canalero ya piensa en el fogueo que tendrán ante Perú el 8 de febrero en tierras incas, aprovechando la primera fecha FIFA del año.

Ni un solo gol en los últimos tres partidos del torneo

Siete goles en cinco partidos dan como promedio 1.4 por juego. Cualquiera podría sentirse satisfecho en un torneo corto con un balance así. Sin embargo, los números a veces mienten, y por eso es que basta con un vistazo más profundo para ver que la producción ofensiva salvadoreña fue lo peor del torneo.

Siete goles. Sí. Pero esos siete goles fueron anotados en los dos primeros del torneo, en los que vencieron 2-0 a Nicaragua y 5-2 a Belice, en los que Rafael Burgos anotó tres tantos entre ambos juegos y que lo ayudaron a terminar la Copa Centroamericana como campeón de goleo.

En adelante, nada. Panamá, en el partido que cerró la ronda de grupos; Honduras, en semifinales; y nuevamente Panamá, en el partido por el tercer y cuarto lugar, dejaron callados a los delanteros salvadoreños, que acabaron pagando caro las intenciones de José Luis Rugamas de jugar solo con un punta en el ataque.

Léster Blanco y Rafael Burgos poco o nada pudieron hacer cuando se midieron en solitario a las defensas panameñas u hondureñas y siempre se les vio vagar sin rumbo sobre la cancha, acaso haciendo alguna presión que no produjo nada. La gran deuda: los delanteros.

Azul opaco

La Selecta jugó su peor partido de la Copa Centroamericana y perdió en la definición por penales el partido por el tercer puesto. Todo lo que El Salvador había hecho en el torneo, se olvidó ayer



Domingo 23 de enero del 2011
El Diario de Hoy

No se pudo. La Selecta, en el peor partido de la Copa Centroamericana, perdió ante Panamá en la definición desde los tiros de penal y regresa a El Salvador con el cuarto lugar del torneo regional.

Fue un partido soporífero, sin ritmo, desordenado, sin calidad, sin nada que comentar, y con un arbitraje que tampoco fue un dechado de virtudes, fue un martirio. Como que nadie quería jugar este partido.

Qué alejado de la realidad estaba Rugamas cuando dijo, en la previa, que querían ganar este encuentro. Lo único emocionante fue el enjambre de abejas que se instaló, al 55', en la portería de Dago Portillo en el segundo tiempo y los trabajos que pasaron para combatirlo.

Porque lo que la Selecta había construido en el torneo, ayer se encargó de botarlo al cumbo de la basura en un partido jugado con muy mal fútbol. Volvió a ser la misma de antes, errática, frágil y sin encontrar el camino.

Para dormirse

Panamá tampoco contribuyó al espectáculo. Aunque le alcanzó muy poco para ser superior a la Selecta. Tal vez no del todo, pero sí más incisiva, con más ganas. Por eso fue la única que llegó a marco, que exigió a Dagoberto Portillo.

Del otro lado, a Jaime Penedo poco le faltó sacar un periódico y leerlo porque El Salvador no llegó ni una vez a su portería en los noventa minutos del partido.

Los canaleros tuvieron tres claras en un primer tiempo de fiasco, insufrible. La primera, al 18', cuando Armando Cooper disparó desde izquierda a las manos de Dago con cierta dificultad para que el portero cuscatleco la soltara y la zaga se revolviera para sacar la pelota del área. La segunda, Blas Pérez quedó cerca de Portillo, pero su disparo quedó en las manos del portero salvadoreño. La última, y quizás la más clara, fue al 32': Gabriel Gómez sorprendió desde atrás por derecha para conectar de "palomita" un centro de Cooper, pero su cabezazo se fue cerca del poste izquierdo de la meta cuscatleca

El Salvador, en los últimos minutos antes del descanso, apenas respondió con un disparo desviado de Deris Umanzor y una jugada que estuvo cerca del área chica de Jaime Alas, pero su centro nunca encontró receptor y los zagueros canaleros siguieron triunfando sobre un solitario y desconocido Rafael Burgos, que le anularon un gol al 54', en fuera de lugar.

Mejor el local

El descanso despertó más a Panamá. Tocó más, insistió más y se vio más ordenada y cerca del gol, de no haber sido por dos "visitas" de las abejas al arco de Portillo, que le enfriaron el ritmo de juego, quizás hubiera conseguido anotar.

Siguió sin ser el partido para Osael Romero, que salió por Gilberto Baires al 58', pero el equipo no cambió. Dely Valdés en cambio mandó a Eybir Bonaga al campo, modificó su esquema para pasar a jugar con línea de tres en la zaga y los canaleros siguieron siendo mejores.

El ingreso de Arturo Álvarez por Andrés Flores tampoco cambió las cosas para El Salvador. Era como si le apostara, desde el principio del partido, a los penaltis y a mantenerse lejos, ilógicamente lejos, de la portería de Penedo.

Panamá pudo irse arriba en dos oportunidades en cinco minutos con remates de Roberto Brown, pero Dago salvó su meta. Luis Rentería lo tuvo después, pero su tiro le salió desviado. En adelante, el partido estuvo firmado para los penaltis.

Se vino la lotería y el sufrimiento. Empezó Álvarez por El Salvador y falló, el único de los salvadoreños que erró desde la mancha penal.

Panamá había estudiado esa asignatura que lo dejó afuera de la final y esta vez nadie erró. Amílcar Henríquez fue el último para que los locales celebraron un podio que ayer lo merecieron más que la Selecta.

El primer goleador salvadoreño en la copa. Burgos quedó en la historia

Compartió el honor de ser campeón de goleo junto al tico Marcos Ureña



Por Gustavo Flores

El partido fue desalentador, el cuarto puesto final en la Copa no significa un avance para El Salvador. Pero si algo quedará para el país en esta olvidable Copa Centroamericana Panamá 2011 es que por primera vez en la historia un salvadoreño quedó como goleador del torneo: Rafael Burgos, delantero formado en Alianza, que brilló en la UES y ahora está de vuelta con los albos. El honor lo compartió con el tico Marcos Ureña, que faltando 18 minutos para el final del partido decisivo marcó el descuento para Costa Rica ante el campeón Honduras.

Aunque Burgos no convirtió en los últimos tres partidos (en realidad El Salvador no hizo goles en estos tres juegos), sus primeras dos participaciones en la Copa le bastaron para ser el campeón de goleo. Un gol a Nicaragua en el debut salvadoreño y dos tantos ante la débil defensa beliceña, marcaron el rumbo hacia el liderato de esta tabla. Un par de chances muy claras que tuvo lo podrían haber dejado como el máximo artillero en soledad pero así como hizo varios goles, también falló otros que parecían hasta más fáciles que los que convirtió.

Sin embargo, nadie le puede quitar el mérito a Burgos de ser uno de los que más la metió en un torneo donde se marcaron 39 goles y en el que participaron hombres emparentados con el gol como Blas Pérez o Welcome.

En su primera participación en un torneo oficial con la Selecta, Burgos inició una carrera en este torneo, aunque todavía lejos del tico Rolando Fonseca (19 goles) y los catrachos Wilmer Velásquez (16) y Milton Núñez (13), goleadores históricos de esta Copa.

Para Burgos, no era prioridad terminar arriba entre los goleadores, sino que El Salvador tuviera un buen papel en el certamen: esto no lo pudo lograr.

Hoy se viene un interesante duelo con Rodolfo Zelaya sobre quien es el mejor delantero del país. Y en esto tiene ventaja el Alianza. Los tiene a ambos.

Tras la Uncaf... la Copa Oro

El Salvador competirá en el próximo torneo oficial, en cinco meses



Por Víctor Zelada Uceda

El Salvador finalizó cuarto en un torneo donde sólo dos equipos se quedaron sin la visa a la Copa Oro, torneo a realizarse en EE.UU., entre el 5 y 25 de junio, (Belice y Nicaragua). En los próximos días, será el sorteo.

Además de EE.UU., el campeón vigente México y Canadá; las demás selecciones clasificadas son Jamaica, Cuba, Granada, Guadalupe, Honduras, Costa Rica, Panamá, Guatemala y El Salvador.

La novedad en el evento será la inclusión de seis nuevos estadios: Ford Field de Detroit, Raymond James de Tampa, Florida; Bank of America en Charlotte, Carolina del Norte; KC Soccer de Kansas.

Los partidos también se jugarán en los campos del Home Depot Center, Los Ángeles; Robert F. Kennedy de Washington; Red Bull Arena y New Meadowlands de Nueva York y en la Universidad FIU de Miami. Dos sedes que se retomarán de nuevo son Pasadena, California y Soldier Field de Chicago.

Antes, se viene el amistoso contra Haití, el 5 de febrero.

Panamá finalizó tercero

La selección panameña no pudo revalidar su título en la Copa Centroamericana, sin embargo ayer logró alzarse con el triunfo desde los 12 pasos al vencer por 5 a 4 al onceno de El Salvador.



La selección panameña no pudo revalidar su título en la Copa Centroamericana, sin embargo ayer logró alzarse con el triunfo desde los 12 pasos al vencer por 5 a 4 al onceno de El Salvador.

LUIS BURÓN-BARAHONA
lburon@prensa.com
La Prensa - Panama

En un partido en el que los protagonistas se concentraron más en las individualidades y se olvidaron de los esquemas tácticos y el juego colectivo, Panamá venció ayer por 5 a 4 en la tanda de penales a El Salvador, tras empatar a cero en los 90 minutos de tiempo reglamentario del juego por el tercer y cuarto lugar de la XI Copa Centroamericana.

Con el tercer lugar obtenido, la selección nacional se adjudicó un premio de 25 mil dólares.

Partido somnífero

Tras unos primeros minutos aburridos y cortados, Blas Pérez tuvo la primera oportunidad del partido a los 18 minutos, cuando tras recibir un pase de cabeza de Roberto Brown, remató de zurda y desviado a la portería defendida por el salvadoreño Dagoberto Portillo.

La llegada istmeña despertó un poco de ímpetu en el seleccionado nacional, y un minuto después, el propio Blas le bajó de cabeza un balón a Armando Cooper, quien entraba a toda velocidad al área chica por la izquierda y no pudo más que sacar un flojo disparo que no trajo ningún tipo de complicaciones para Portillo.

Cuando el reloj del estadio marcaba 30 minutos, Roberto Brown le cedió de testa la esférica nuevamente a Pérez, quien remató directamente a las manos del cancerbero salvadoreño.

Tres minutos después, Dely Valdés ejecutó una jugada de laboratorio que casi pone en ventaja al equipo panameño.

En un tiro libre en tres cuartos de cancha por la izquierda, Gabriel Torres pasó al medio del campo a Armando Cooper, quien esperó que se moviera la defensa rival para enviar un centro englobadito al sector izquierdo del área chica, por donde venía entrando Gabriel Gómez. Gavilán remató de cabeza, pero el balón se fue desviado.

A partid de ahí, el partido tomó una tónica monótona y aburrida, y no fue hasta el 43 que El Salvador tuvo una llegada de peligro, cuando Deris Umanzor entró al área panameña y remató bastante desviado del arco custodiado por Jaime Penedo.

El ataque de las avispas

A los 11 minutos del segundo tiempo, cuando Panamá se disponía a cobrar un tiro libre a 30 metros de la portería salvadoreña, el cancerbero Portillo llamó al árbitro y le avisó de la existencia de avispas en el vértice derecho del arco.

Luego que el partido se dilatara por casi seis minutos, reanudaron el cotejo tras prácticamente vaciar un extintor de fuego.

Seguidamente, a los 73 minutos de tiempo corrido, Portillo volvió a llamar la atención del árbitro. Las avipas habían regresado.

Nuevamente se roció con un extintor la portería salvadoreña.

Esta vez, los insectos no se tomaron alegremente la represalia y atacaron a fotógrafos y jugadores.

Al minuto 85, Luis Rentería, quien tenía solo un minuto de haber ingresado a la cancha por Blas, remató con violencia pero sin complicación al portero salvadoreño

A los 86, Brown tuvo la más clara de la etapa complementaria, cuando tras recibir un centro de Amílcar Henríquez cabeceó con fuerza al cancerbero salvadoreño, quien reaccionó a tiempo y la manoteó, dejando el esférico para que su defensa despejara.

A dos minutos del final, Brown le bajó el balón de pecho a Rentería, quien remató a placer de pierna derecha al borde del área pero su tiro se fue desviado.

Ficha técnica

Panamá: Jaime Penedo; Felipe Baloy, Román Torres, Harold Cummings, Adolfo Machado (Eric Davis 24’); Gabriel Torres, Amílcar Henríquez, Gabriel Gómez (Eybir Bonaga 65’), Armando Cooper; Roberto Brown y Blas Pérez (Luis Rentería 84’).

El Salvador: Dagoberto Portillo; Marvin González, Luis Anaya, Moisés García, Deris Umanzor; Víctor Turcios, Jaime Alas, William Romero (Gilberto Bares 59’), Dennis Alas, Andrés Flores (Arturo Álvarez 71’); Rafael Burgos (Mark Blanco 93’)

Árbitro: Benigno Pineda (Honduras)

Tiros Penales

Panamá 5
Roberto Brown - Muy seguro, anotó con un tiro despacio al centro.
Gabriel Torres - Golazo. La metió en el ángulo derecho.
Eric Davis - Bien cobrado. Arriba y al lado izquierdo.
Eybir Bonaga - Tiro de derecha cruzado y abajo.
Amílcar Henríquez - Un disparo fuerte y cruzado a la derecha.

El Salvador 4
Arturo Álvarez - Su tiro de zurda fue adivinado por Penedo.
Jaime Alas - Un zurdazo bien dirigido y esquinado.
Léster Blanco - Nada que hacer para Penedo.
Dagoberto Portillo - Anotó con un disparo fuerte y al medio.
Denis Alas - Fusiló a Penedo con un derechazo al medio.

PANAMÁ VENCE A EL SALVADOR

Consolación



El partido se definió en ronda de penales

OMAR DE LA CRUZ
odelacruz@elsiglo.com
El Siglo - Panama

Panamá se quedó ayer con el premio de consolación de la Copa Centroamericana de Fútbol, cuando venció en penales a El Salvador, ayer en el estadio Rommel Fernández.

Panameños y salvadoreños se enfrentaron dos veces en este torneo.

Los cinco pateadores panameños no fallaron en la tanda de penales, por lo que Panamá la ganó 5-4, en un partido que oficialmente terminó 0-0, ante los salvadoreños.

Roberto Brown, Gabriel Torres, Eric Davis, Eiber Bonaga y Amílcar Henríquez convirtieron sus cobros para Panamá. Mientras que de El Salvador fueron efectivos los cobros de Denis Alas, Marc Blanco, Dagoberto Portillo y Jaime Alas, pero el disparo de José Álvarez fue contenido por el portero Jaime Penedo.

Ni Blas Pérez ni Felipe Baloy patearon penales ayer por Panamá, el primero porque fue sustituido del juego. Pérez y Baloy fallaron penales que costaron la clasificación a la final, en el partido ante Costa Rica.

Al encuentro no asistieron menos de 500 fanáticos panameños y en total concurrieron al estadio Rommel poco más de dos mil aficionados, en su mayoría costarricenses.

El juego fue de pocas emociones y en el mismo se reflejó el cansancio de ambos onceno, debido al poco descanso entre partidos.

Al inicio del partido se dio un minuto de silencio en memoria del fallecido Jack Cardoze hijo.

Lo más sobresaliente fue la presencia en el segundo tiempo de abejas africanas, las cuales se posaron sobre el pórtico salvadoreño y detuvieron el partido en dos ocasiones, provocando que el árbitro central Benigno Pineda de Honduras diera 13 minutos de reposición.

‘Ganamos este partido para que la afición estuviera contenta, pero en el fondo estamos desilusionados por no haber llegado a la final’, expresó el mediocampista panameño Amílcar Henríquez.

PANAMEÑOS PASAN LA PÁGINA DE LA COPA



OMAR DE LA CRUZ
odelacruz@elsiglo.com

Los jugadores panameños se resignaron a pasar la página de lo ocurrido en Copa Centroamericana en Panamá, donde los canaleros no pudieron ratificar su estatus de campeones de la región, al ser eliminados por Costa Rica en semifinal.

‘Ahora nos toca trabajar pensando en Copa Oro’, indicó el portero Jaime Penedo, quien se llevó el trofeo al mejor portero de la Copa Centroamericana, pues fue el que menos goles recibió, sólo uno.

Penedo aseguró que el actual equipo panameño de fútbol es una mezcla de jugadores con experiencia y juventud.

Panamá obtuvo el tercer lugar del torneo centroamericano al vencer en penales 5-4 a El Salvador.

Los panameños no pudieron ratificar el campeonato ganado en el 2009, a pesar de jugar como locales.

‘Copa Oro es lo que sigue para nosotros. Prepararnos para ese torneo y realizar amistosos’, expresó el defensa Felipe Baloy, quien añadió que es triste y hasta algo injusto como Panamá terminó de tercero del torneo, pero sin perder oficialmente ningún partido.

Baloy falló su tiro en la ronda de penales ante Costa Rica y ayer se le preguntó por qué no se fue enviado a patear penales ante El Salvador, a lo que respondió: ‘fue decisión del técnico, él consideró que habían mejores cobradores’.

Penales de bronce



La selección panameña finalizó en la tercera posición del certamen, tras empatar 0-0 con El Salvador en el tiempo reglamentario y ganar 5-4 en los penales

GERMÁN BELLINI
gbellini@laestrella.com.pa
La Estrella - Panama

PANAMÁ. La selección local logró quedarse con la tercera posición de la Copa Centroamericana 2011, tras vencer a El Salvador por la misma vía con que lo dejó sin chance del bicampeonato.

Luego de empatar sin goles en los 90 minutos, los panameños ganaron 5-4 en la tanda de penales.

En un juego en el que dominó Panamá de principio a fin, la ‘Roja’ no pudo quebrar el cero tras constantes ataques sobre el arco salvadoreño.

Panamá se quedó con el tercer lugar



Esta vez, la suerte en los penales estuvo del lado de la ‘Roja’ que terminó ganando el partido por 5-4 a El Salvador para finalizar tercero

PANAMÁ. La selección panameña finalizó su participación en la Copa Centroamericana ante un escaso público en el Rommel Fernández, donde derrotó a El Salvador desde el punto de penal por 5-4, luego de que los 90 minutos terminaron sin goles.

De esta manera, Panamá finaliza el certamen en la tercera posición y con un boleto para jugar la Copa de Oro en junio, al igual que Costa Rica, Honduras, El Salvador y Guatemala.

Desde el inicio del encuentro, la selección dirigida por Julio Dely Valdés se hizo con el balón y fue la que generó las acciones de peligro de la primera mitad, pero que en su mayoría terminaban en remates desviados.

Panamá basó su ofensiva en centros laterales y frontales que los salvadoreños rechazaron sin complicaciones, pero, a la hora de atacar el arco panameño, sus intentos morían en el borde del área grande.

La selección local dominó el juego de inicio a fin, pero tuvo que esperar hasta los penales para quedarse con la medalla de bronce.

Por su parte, El Salvador se mostró sumiso, conforme con la clasificación a la Copa de Oro, y apostó sin suerte al contragolpe.

Esta es la segunda vez en el certamen que la ‘Roja’ termina en la tercera posición, luego de que lo hiciera en la edición de 1993 disputada en Honduras.

Destacable, nada más

Un resumen de la participación salvadoreña en la copa C.A.

Lunes, 24 de Enero de 2011
El Diario de Hoy

De más a menos, la Selecta salvadoreña recuperó, en parte, la imagen perdida en el inicio de la Copa Centroamericana, pero después, lastimosamente, se despidió por la puerta de atrás. Sin embargo, no hay que menospreciar el papel realizado por una selección con muy poco fogueo, joven y casi sin experiencia.

No se llegó a niveles de sobresaliente, pero sí se vio una Selección distinta a la de los últimos meses, aunque nuevamente se haya repetido la historia de jugar como siempre y perder como siempre. Tuvo un desempeño que no se podría calificar más allá de lo destacable. Apartando el último partido ante Panamá, el del tercer lugar, para muchos, esta selección deja la Copa Centroamericana como el equipo que mejor manejó el balón, que siempre fue para adelante, que incluso fue mejor que los equipos que la derrotaron, pero la novatez, su físico y la falta de contundencia en el ataque fue su mayor rival.

Los siete goles que marcó en los primeros dos partidos fueron un tanto engañosos, tomando en cuenta que los convirtió ante equipos que históricamente no han representado mayores sobresaltos. Tampoco hay que obviar que Nicaragua y Belice fueron el fogueo que, quizás, esta selección necesitó antes de llegar a esta competición.

A esta Selección le faltó rodaje, experiencia, tiempo para implantar una idea, corregir errores, superar deficiencias. Quizás no le tuvieron confianza al técnico Rugamas y su equipo, quizás fue mala planificación, negligencia, o lo que sea, lo cierto es que esta Selección cumplió lo que muchos ni siquiera se imaginaban. Aunque en el último partido les haya dado la razón a los más escépticos.

La realidad

Llegaron Panamá y Honduras, selecciones fogueadas con responsabilidad, con jugadores curtidos, con una idea clara de cómo jugar, y desnudaron a la Selecta, quizás sin ser mejores, porque nadie dudará que ante los catrachos la Selecta mereció más, lastimosamente el fútbol no es de merecer los goles, sino de hacerlos. Ahí, en esos partidos, salieron a relucir los errores que no se vieron en los goles de Belice, porque no eran significativos, pero que siempre estuvieron ahí.

Panamá tampoco fue mejor a la Selecta, pero contaba con la ventaja de la loca lía, del horario, programó su partido ante El Salvador a una hora en la que no había jugado la Selecta en el torneo y en la que ella siempre lo hizo, pero sobre todo en la experiencia. Esperó la oportunidad y la aprovechó. Luego, el domingo, a la hora en la que hizo sus dos primeros partidos la Selecta, volvió a ser mejor Panamá, pero ambas selecciones quedaron debiendo en un partido para el olvido.

Nueva generación

Amén de los resultados, la realidad es que la Selección sale gananciosa. Jugadores como Rafael Burgos, Jaime Alas, Edwin Sánchez, Gilberto Baires, Andrés Flores, Xavi García, Herbert Sosa, Víctor Turcios y otros, demostraron ser una generación de la que se podría llegar a hablar, desde ya, en un recambio positivo para el equipo nacional, sin menospreciar a los que se quedaron en el país, quienes podrían aportar la cuota de experiencia que faltó en el equipo, a pesar del aporte de Marvin, Anaya y compañía.

Claro, como dice Rugamas, con jugadores que no están en el equipo, por una u otra razón, se podría llegar a hacer un buen grupo, pero la base ya está y no hay que dejarla perder. Hay que prestarle mucha atención, como lo dijo Julio Dely Valdés, el DT canalero, tras el partido del domingo.

Los casos de Burgos y Alas son especiales. Con su poca experiencia y juventud, son considerados; el delantero aliancista, el referente del ataque salvadoreño y terminó el torneo como campeón de goleo junto al tico Ureña. Y el mediocampista firpense fue considerado uno de los mejores jugadores del torneo.

No fue el torneo para Arturo Álvarez, que aparecía como el director del juego del equipo, no vino en condiciones y eso le pesó. Dos penaltis fallados y algunas ocasiones de mano a mano son los puntos negros del volante. Un torneo entre regular para abajo.

Hasta antes del partido del domingo, Osael Romero se había convertido en el motor del equipo de Rugamas. El domingo no fue su día, pero este fue su torneo. Como lo fue también para Víctor Turcios, anónimo, fue el jugador que destruyó lo que le llegó por su sector. De Dennis Alas, poco que decir, volvió a demostrar su calidad de juego.

Fue también un torneo bueno para los zagueros. Marvin González y el "retornado" Luis Anaya cumplieron, lo mismo Deris Umanzor, pero sobre todo para Xavi García, quien demostró que El Salvador tiene lateral derecho para rato, tanto, que cuando faltó se notó porque Milton Molina, si no lo hizo mal, le afectó el torneo.

Quizás algunos de ellos hayan tenido muy poco tiempo de juego, o el técnico se haya tardado demasiado en sus cambios, pero eso es decisión de él y hay que respetarlo. Nadie asegura que con más tiempo, con cambios más expeditos, la Selecta hubiera tenido el torneo que tuvo.

Hay que resaltar que esta selección no le rehuyó a la confrontación con hombres con mejor físico, con más experiencia, no se escondió. Y lo más importante, no terminó de manera bochornosa como la edición pasada cuando cumpliendo una orden de a saber quién varios jugadores se tiraron al suelo para rehuirle a los ticos en semifinales.

Nadie puede negar que la Selección no se paró. Siempre fue hacia adelante, propuso, buscó el gol, pero le hizo falta calma y sangre fría y, sobre todo, orden.

Hoy se viene la Copa Oro en junio, cuatro meses que deberían ser aprovechados para cimentar esta base de jugadores con sus razonables incorporaciones. Podría ser con Rugamas, o con otro técnico, la verdad es que urge que los dirigentes se decidan para no botar el trabajo hecho por esta Selección que llegará a El Salvador con un cuarto lugar que pocos creyeron.

Lástima que terminó en blanco y negro un torneo que lo había hecho a color, pero la verdad es que esta selección, con más trabajo, podría superar el destacable y alcanzar el sobresaliente.

Conclusiones de Rugamas

¿Qué es lo más destacable de este equipo?
Siempre fuimos ofensivos, nunca fue un equipo que se tiró atrás, sino que siempre quiso proponer y al mismo tiempo mantener la posesión de la pelota, eso es lo más destacable, que siempre fue, fue un equipo que buscó el gol, que fue a presionar cuando se pudo y desgraciadamente lo que le hizo falta fue el gol, pero pienso que vamos por el camino correcto.

¿Con qué se queda de esta Copa?
Primero con tener un equipo que vino a demostrar que tiene capacidad, que hay jugadores jóvenes con mucho talento, que demostraron que tienen para rato para estar en una Selección, que sólo lo que necesita es jugar más partidos de fogueo para crecer.

¿Con fogueos hubiera sido otra historia?
Tal vez no. En el torneo, desgraciadamente los resultados no fueron favorables, pero como equipo sé que nos falta, no es fácil. Creo que le sacamos provecho al poco tiempo de la Selección que trabajamos, pero estábamos conscientes del compromiso y le sacamos provecho. Este grupo merece más.

¿Qué le faltó al equipo?
El gol. Llegamos, tuvimos oportunidades. Bueno, toda la gente nos lo dice. El partido ante Honduras teníamos que ir dos o tres cero en el primer tiempo. Tuvimos las oportunidades más claras. Después nos cayeron los goles cuando fuimos a arriesgar.

¿Cree que la gente que se quedó afuera de la Selección le habría cambiado la cara?
Es una pregunta bien difícil. Yo siempre he dicho que la Selección va a estar para aquellos que estén pasando un buen momento y creo que en El Salvador hay más jugadores que podrían estar, pero que siempre y cuando estén en buenas condiciones y que quieran estar en la Selección. Hay jugadores que si no están en su punto, no nos van a rendir.

Aparte de la falta de gol, ¿hay otro aspecto negativo de esta Selección?
Negativo no le encuentro nada, al contrario pienso que este equipo tiene que irse fortaleciendo, ir mejorando y lo que ha costado formar este grupito no ha sido fácil. Me alegra que agarraron rápido la idea, a eso se ha apostado.

¿Cuál es la imagen que deja esta Selección?
Hasta el momento han sido sólo halagos, buenos comentarios. Tenemos un fútbol muy rápido, que presiona, que tiene buena técnica, lo que nos ha faltado es el gol. Yo pienso que los dos delanteros que trajimos, más los que hay en El Salvador, pienso que si ellos se proponen y se preparan, podemos ser contundentes.

¿Algún momento creyó que se equivocó en este torneo?
Es difícil decir 'me equivoqué' o acerté, yo pienso que los cambios que uno hace siempre los hace con la idea de mejorar. El caso de Molina en el partido contra Honduras, sé que es un jugador joven, sé que era un partido para él nuevo, lo vi un poco nervioso, no dudo de su capacidad. Equivocarme no, quedan las dudas, pero traté de hacer lo mejor posible.

¿Qué pasó con Arturo Álvarez. Fue de más a menos?
Es problema físico. Nadie duda de sus condiciones. Sabemos que es un desequilibrante, pero jugador que no está bien preparado físicamente después el rendimiento es notorio. Arturo, en buena condición, otra cosa hubiera pasado.

¿Qué se le viene a este equipo?
Uuuuu, buena pregunta. Después de terminar la Copa, no sé. Sería una pregunta para los dirigentes, a ver qué es lo que piensan hacer. Lo que sí le puedo decir es que hay una buena base.

¿Merece seguir esa base?
Merece, merece, pero son decisiones de la persona que quede encargada, no sé. Acuérdese que formar una Selección cuesta, conjuntarla más todavía y meterle la idea no es fácil. Yo le digo porque con Carlos De los Cobos tuvimos cuatro años en ese proceso y se tardó casi tres años en que el jugador captara como quería jugar Carlos y no fue fácil.

Pero esta es una nueva Selección, muy distinta a la que dejó De los Cobos ¿Se le puede llamar la Selección de José Luis Rugamas entonces?
Bueno, yo le sacaba eso de Carlos así, como un ejemplo que estuve en ese proceso y le costó e hizo un buen trabajo y dejó en la retina del aficionado que la Selección jugaba muy bien. Pienso que ya sería cuestión del periodismo, pero lo que yo he tratado es hacer un equipo más ofensivo, un equipo que proponga, que vaya a buscar resultado. Pero eso de que es el equipo de José Luis Rugamas, eso ya es decisión de los periodistas.

¿Y a Rugamas, qué se le viene?
Vamos a ver. Incertidumbre porque hasta el momento no sabemos. Claro, el deseo de todo técnico es continuar, pero ya no es decisión mía y hay que esperar...

¿Tomaría el reto de seguir?
Porqué no, claro. Desde luego acepté y estoy acá es por eso. Yo respeto la decisión que vaya a tomar el Comité Ejecutivo.

¿Y si le ofrecieran el puesto de auxiliar, lo aceptaría?
Habría que ver, que platicar, pero habría que esperar a que ellos primero me lo pidan.

¿No está cerrada esa posibilidad?
Por eso le digo, la pregunta es bien difícil cuando también podría venir de ellos. Pero habría que ver y no cerrar todo lo que sea por el bien de la Selección podría ser y si me la dan, mejor todavía.

¿Se ve en la Copa Oro?
Me gustaría, claro que sí. He estado como asistente en tres Copas de Oro, una con Kyril y dos con De los Cobos. La cuarta podría ser la vencida y estar como principal Bueno, podría ser. Me gustaría, claro que sí.

Rafa Burgos volvió con el trofeo

El delantero de la selección nacional anotó tres goles y fue uno de los máximos anotadores de la Copa.



Martes, 25 enero 2011
Gabriel Campos Madrid

Para Rafael Burgos su debut con la selección mayor, aunque pudo ser mejor, fue satisfactorio. Regresó al país con el trofeo de campeón goleador en sus manos gracias a los tres goles que anotó en los primeros dos juegos: uno a Nicaragua –en la primera jornada– y dos más a Belice –en la segunda–.

El delantero, que desde hoy se incorporará a Alianza –casa a la que regresa después de disputar el Apertura 2010 con la Universidad de El Salvador–, tomó el premio como una motivación para seguir trabajando de cara a los próximos compromisos que sostendrá la Azul.

“De esta primera experiencia con la selección me voy satisfecho con mi rendimiento. Obviamente, como delantero me hubiese gustado marcar más goles, pero estoy contento porque se logró el objetivo de clasificar a la Copa de Oro”, adujo el que fuera titular en cuatro de los cinco juegos que disputó la selección en Panamá.

Sobre el premio al mayor goleador, que compartió con el costarricense Marco Ureña, Burgos confesó sentirse feliz, dado que era su primera convocatoria, aunque le dejó un sinsabor el hecho de que la selección no haya conseguido llegar hasta la final de la Copa, dado que esa era la segunda meta planteada.

“Primero Dios se van a dar más torneos, más oportunidades en el futuro. Esperamos que las cosas ahí se nos den como queremos”, dijo.

Jaime Alas iría a Grecia

El jugador dijo que en marzo podría hacer una prueba en un equipo de ese país.



El desempeño que tuvo Jaime Alas en la Copa Centroamericana no pasó desapercibido. Al llegar ayer a suelo salvadoreño, el mismo jugador reveló que en marzo próximo podría tener la oportunidad de realizar una prueba con un equipo del fútbol de Grecia, aunque no mencionó nombres.

Por el momento el menor de los hermanos Alas aún tiene seis meses de contrato con Firpo –con el que posiblemente sea titular mañana ante Águila, por la jornada uno del Clausura 2011–, pero eso, según dice, no tendría problemas en poder viajar a realizar la prueba.

“En Panamá hablé con un señor y me dijo que estaríamos en contacto, que seguiríamos hablando. Me dijo que en marzo realizaría una prueba en Grecia. No me dijo equipo”, confirmó el volante que en la Copa Centroamericana tuvo su debut con la selección absoluta, y donde anotó sus dos primeros goles.

Otro de los futbolistas que afirmó haber tenido acercamientos de parte de empresarios extranjeros fue el delantero Rafael Burgos, aunque dijo que no hubo nada oficial, sino pláticas informales.

Estos dos casos demuestran que lo hecho por la Azul en tierras canaleras dejó aspectos positivos, sobre todo para el grupo de jóvenes que viajó y que se estrenó a nivel de selección mayor.

Para el capitán Marvin González, la apuesta para el futuro debe ser este grupo de jugadores que promedia 23 años de edad, y en el que al menos cinco jugadores menores de 22 años disputaron su primer partido en un torneo oficial, además de demostrar un estilo de juego que gustó a los ojos de muchos.

“Esperamos que a esta selección se le de continuidad, sobre todo a los jóvenes que ya están agarrando experiencia. Que poco a poco y con partidos, con más fogueos, lleguen a los torneos y la eliminatorias con más rodaje”, expresó Marvin, quien desde ayer se unió al Águila.

De la misma manera se expresan el técnico José Luis Rugamas y el delantero Léster Blanco.

“El Chelis” se declaró a gusto con la actitud mostrada por el grupo en el campo, a la vez que espera que para los próximos juegos los jóvenes sigan demostrando sus virtudes.

Por su parte, Léster hizo énfasis en que sea quien sea el que llegue al banquillo técnico en lugar de Rugamas –que está a la espera de una notificación sobre su futuro– le dé continuidad al grupo.